Contenta de intentar y no fallar en recuperar lo que había perdido. Siempre estuviste, pero no te supe valorar y hoy tío te quiero contar que sos un ejemplo, que sos alguien especial y no un familiar más. La verdad es que para mí no existe nadie con la misma personalidad que vos, alguien con quien pueda entablar una coherente conversación, que pasemos ratos hablando de nuestros derechos, de nuestros sueños, de religiones, de problemas en la escuela, de contarnos como nos fue el día, que comimos, que hicimos, como nos trata la vida. Sé que tuvimos diferencias, se que las personas que están en nuestro entorno no siempre se llevaron bien, pero vamos, superemos los tramos, empecemos de cero sin peros, sin rodeos, sin problemas, ni diferencias que nos puedan dañar. Tío, estoy orgullosa del lazo que hicimos.